Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de septiembre, 2018

Unas palabras para mi hijo en sus 15 años.

Ese día me fui expectante al trabajo. De hecho la noche anterior que se quedó tu mamá en el hospital creo que me costó dormirme. No recuerdo bien. Ese día llegué a la oficina y recuerdo que un poco antes del mediodía no recuerdo cómo pero confirmé que ya habías nacido. Pedí permiso a la esposa de mi entonces jefe explicándole el motivo,  ella contenta me felicitó y me dijo "vaya". Me fui y llegué lo más pronto que pude al hospital. Ya estaba allí mi prima, no se me olvida eso, esperando la hora de la visita. Me identifiqué y entramos los dos, mi prima y yo. Llegué a la cama donde estaba mamá y vi que vos no estabas. Eso me preocupó un poco.... Mentiras!!, me aterrorizó!!! - sinceramente -  como a todo buen padre primerizo le hubiera sucedido. Me dijeron dónde estabas y llegué a esas incubadoras, y te ví finalmente. Me tranquilicé y sentí la alegría más inexplicable que haya sentido, esa misma que sentí cuando ví a tu hermano también cuando nació. De ese día para acá,

Cuando los Chicos Crecen.

Una plática que tuve con una excelente amiga esta semana me hizo reflexionar como padre, les comparto mi parecer.  Verdad: Los chicos crecen.  Los padres tenemos esa idea respecto a que los hijos siempre serán los chiquitines de la casa. Es una idea que solemos cometer el error de asumirla como una verdad literal y al hacerlo tácitamente procedemos a ignorar la evolución natural de la vida que va de la mano con el tiempo. Lo cierto es que los chicos crecen. Ellos se convierten en adultos. En el hogar latino, por lo general no tenemos esa idea de "mandar a volar" a los hijos una vez llegan a la edad universitaria como ocurre por regla en otras culturas. Conste, no soy partidario de esa práctica sin embargo, lo que sí considero que hacemos mal como padres es que paralelamente parece que no tenemos conciencia real de la situación de nuestros hijos ahora convertidos en adultos en casa y como sujetos legalmente reconocidos. Al crecer y llegar a la vida adulta, nuestros c